Comparativa entre Sildenafil y Tadalafil. ¿Cuál es mejor? 

Al perder la potencia sexual, un hombre puede atravesar un periodo de inseguridad y frustración. La posibilidad de ver comprometida su intimidad en pareja puede incluso desarrollar problemas como la ansiedad o la depresión. Sin embargo, una de las soluciones posibles se encuentra en la medicina, la cual ha conseguido resultados bastante favorables en alternativas como Tadalafil y Sildenafil. 

Hacer una comparativa sobre estos dos medicamentos, ambos distribuidos por marcas como Deus Power, podría aclarar las dudas más frecuentes. No solo se ha implementado para lidiar con la disfunción eréctil, sino que también puede ser recetado para tratar problemas de la próstata. De modo que si quieres descubrir más sobre las ventajas del Tadalafil, te invitamos a continuar leyendo el siguiente artículo. 

Lo que dicen los expertos sobre el consumo de Tadalafil

Los siguientes tres aspectos que abordamos a continuación representan los puntos claves más comunes entre las dudas con relación al uso de Tadalafil: 

Cuanto Tadalafil debemos tomar: Según el perfil del paciente, la dosis habitual de Tadalafil recomendada por especialistas no supera los 10 miligramos. 

Rango de tiempo entre pastillas: El efecto del Tadalafil es prolongado, así que lo más saludable es no tomar más de una pastilla en un rango de 24 horas. 

Análisis previo del paciente: El tratamiento debe enfocarse en el perfil del paciente, evitando la generalización. Recordemos que es el médico especialista el encargado de realizar la evaluación pertinente para determinar la mejor dosis ajustada a las necesidades de cada persona. 

Impotencia sexual: ¿Es el Tadalafil la solución?

Las propiedades del Tadalafil ofrecen beneficios para la salud en casos de agrandamiento benigno de la próstata. También algunos especialistas recomiendan este fármaco para tratar la hipertensión pulmonar y algunos trastornos en la orina. 

Su función principal es dilatar las venas, generando una mejor circulación de la sangre. Al tratarse de un medicamento vasodilatador necesario que se consuma con supervisión de un especialista. Como ya hemos mencionado, no es un afrodisiaco, así que por sí solo no tendrá un efecto en el deseo sexual. 

Dicho de otra manera, el Tadalafil no se utiliza para generar una erección por sí solo, un aspecto que sí puede generar el Sildenafil. En tal sentido, no se trata de definir cuál es mejor, sino de determinar cuál es más apto para cada paciente según el contexto. 

Para tener una idea más clara sobre la eficiencia de cada fármaco, vamos a ilustrar algunos ejemplos plantando dos casos hipotéticos: 

Si se desea una erección más fuerte y prolongada, el uso de Tadalafil es mucho más recomendable como tratamiento “a demanda”. Su efecto suele ser más duradero, y no hay problema alguno en tomar una dosis diaria con una hora de antelación al acto sexual. 

En vista de la popularidad que han ganado estos medicamentos, es indispensable adoptar un estilo de vida saludable. A propósito de esto, algunos expertos recomiendan una dienta baja en grasa si se tiene en mente adoptar un tratamiento con Tadalafilo con productos de marcas como Deus Power